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TESTIMONIO HNO LUIS M.

           22-08-2015

 

Tome la decisión de congregarme pero ese no fui yo. Esta decisión no la pude tomar por mí mismo, no podía hacerlo, estaba tumbado a la orilla y todo enmarañado en mis argumentos, condenado, perdido y mis debilidades me tenían inmovilizado, espera ahí todo enredado no podía con eso solo, agotado cansado de tratar de escapar de mí mismo. Fueron los dichos inspirados del ministerio en una sencillez inmensa fueron sacando los abrojos, las espinas, me fue sacando de esa maraña, que fue mi tumba, la hermana Rosa Noemí conto su testimonio, eso fue una preparación para mis oídos, y me posiciono fue como una instrucción previa me dejo sensible a su voz. Era el mismo Ángel hablando por su ministro, me hablo de mi llamado a la resurrección me advirtió que era sencillo, sin emoción pero veraz, que aquí no era un negocio con el de afuera que todo era en ese cuerpo Glorioso del Cristo, todo lo que salió de la boca cayo en mi corazón y algo como girando limpiándome, sacando todo lo que me detuvo por todo este tiempo, era tan dulce esa voz que no me pude negarme a seguirla y por eso vengo por más, y solo quiero seguir oyéndolo a El, esa voz de CARIDAD de mi llamado a la resurrección. Vi al verbo con mis propios oídos y también pude palparle comió en mi mesa la comida natural pero el extendió su mesa y me dios de sus manjares de siete platos que emiten sus voces, y supe que para mí también había lugar, vino por mí no podía ser de otra manera porque así es en la parábola de los invitados como también de la oveja perdida. Su misericordia me alcanzo en amor pero fue virtud que entro y dijo nada más, ni nada menos y me liberto, agradezco todas sus oraciones incesantes y su amor fraternal, déjeme decirle que nada menos moverá a una hija o un hijo hoy, no importa su condición, lo grave o duro que usted considere su condición, espere por El cuándo El llega sabrá todo lo que hay que hacer, hermana no de consejos no se meta usted con el descarriado, tenga paciencia con Dios, solo clame, adore y de gracias, por el “hecho esta” Por qué este es el día que nada menos moverá a un hijo, que la voz de la resurrección y solo ella lo posicionara en donde sabemos los hijos deben estar.