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0209A - A Él Oid Rev. William Marrion Branham

 

No es la iglesia santa; es el Espíritu Santo en la Iglesia que la hace santa. No es el hombre santo; es el Espíritu Santo en el hombre que lo hace. No un hombre santo, no existe tal cosa; es un Espíritu Santo. Y Pedro se refería a esto como una montaña santa, por cuanto un Dios santo se encontró con ellos en esta montaña. Era arena sagrada. Y permítanme detenerme aquí esta tarde y decir esto: que cada uno de Uds. que ha nacido de nuevo del Espíritu Santo, Ud. recuerda la hora exacta cuando el Espíritu Santo, el lugar exacto donde Él se encontró con Ud. Y cuando vengan las dudas, y los temores se levanten, siempre estará ese cierto lugar, al cual Ud. puede regresar al momento cuando Ud. se encontró con Dios, y el diablo no puede pisar esas arenas sagradas. Es donde Ud. se encontró con Dios y le habló a Él. Aunque temores y cosas se levanten, no tiene nada que ver en el asunto. Ud. sabe que se encontró con Dios en esas arenas sagradas. 58-        

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                                                       1 Juan 5:6

Y el Espíritu es el que da testimonio; porque el Espíritu es la verdad.